Puinhoop
Veinte años después de que Allard redujera al mínimo la relación con su madre, la policía lo llama. La encontraron en una casa completamente desordenada donde ya no puede valerse por sí misma. Decide no abandonarla en este estado y se responsabiliza de su cuidado. Finalmente, termina en un pabellón psiquiátrico cerrado. En este documental culpa de todo a su hijo y quiere que se comporte como un buen hijo.