En la historia del cine ha habido muchos intentos de retratar lo mítico como algo íntimo y lo radical como un viaje personal. Pero solo hay un artista que es salvajemente anarquista, metafísicamente misterioso y al mismo tiempo obsesionado por Dios y fanático de la verdad: Abel Ferrara, que aquí unirá fuerzas una vez más con su alter ego en la actuación, Willem Dafoe. Mientras que su película anterior "Tommaso" exploró la forma en que se desarrolla el deseo en las familias, en "Siberia" el ego (masculino) abandona toda apariencia de la vida cotidiana en un montaje tumultuoso. Para exponerse y descubrirse a sí mismo.
Ésta es la sinopsis del filme:
"Un hombre huye de un mundo a otro que le será extraño y frío. Las pieles y los fuegos lo mantienen caliente; Una cueva le servirá de refugio. Es un hombre destrozado que quiere estar solo. Pero incluso el aislamiento no le trae paz interior. Una vez más, se va de viaje, esta vez un viaje interior. Explorará sus sueños, confrontará sus recuerdos y buscará visiones. Los raros encuentros con otras personas serán en idiomas que no habla, con cuerpos fascinantes y tipos de amor de explorar y pierder. Su viaje se convertirá en una danza con los demonios".
La película ha sido presentada en la edición de la Berlinale que está teniendo lugar estos días y aún se encuentra a la búsqueda de un distribuidor para ser estrenada en los Estados Unidos. | 
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