Una vez dejado de lado, incluso considerado criminal, el graffiti ha allanado el camino para muchos artistas exitosos y creíbles en la actualidad. Con Duality, estos artistas callejeros (algunos por primera vez, otros manteniendo un estricto código de anonimato) hablan de sus viajes desde “etiquetar” hasta convertirse en íconos respetados en las ciudades a las que sirven con piezas que son impresionantes en alcance, tamaño y complejidad. . Han demostrado colectivamente que su género de arte es algo que puede influir en la cultura, evocar emociones, inspirar y cultivar la comunidad. Su ascenso no ha estado exento de desafíos y críticas, pero hoy en día son admirados por multitudes de fanáticos y, a menudo, el arte que producen genera ingresos para marcas familiares y corporaciones de todo el mundo. Ya no relegadas a callejones secundarios, sus obras se pueden encontrar en las calles principales, en las fachadas de edificios emblemáticos y en galerías de bellas artes.
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