La pelea en los juzgados entre Scarlett Johansson y Disney, que parecía que podría cambiar las relaciones contractuales de las grandes estrellas de Hollywood con los grandes estudios, finalmente se ha resuelto con un acuerdo extrajudicial que no le ha salido precisamente barato a Disney.
Este viernes la actriz y el estudio han anunciado la firma de un acuerdo para dejar a un lado la demanda que la actriz había interpuesto el pasado julio en el Tribunal Superior del Condado de Los Ángeles por la decisión de la compañía de estrenar simultáneamente Viuda negra, un blockbuster de serie A protagonizado por la actriz, en salas de cine y en su servicio de streaming Disney+. Johansson reclamaba una compensación por el perjuicio monetario que conllevó para ella ese cambio de planes: un porcentaje del sueldo de la actriz provenía directamente de lo recaudado en salas de cine.
"Estoy feliz de haber resuelto nuestras diferencias con Disney", dijo Johansson en el comunicado. "Estoy increíblemente orgullosa del trabajo que hemos hecho juntos durante estos años y he disfrutado mucho de mi relación creativa con el equipo. Estoy deseando continuar nuestra colaboración en los próximos años."
Al contrario que en sus vitriólicas declaraciones de los últimos tiempos, Disney, propietaria de Marvel, no tenía más que amor hoy para la actriz que dio vida a Natasha Romanoff para ellos en casi una decena de películas.
"Estoy muy contento de que hayamos podido llegar a un acuerdo mutuo con Scarlett Johansson en relación con la Viuda Negra", dijo Alan Bergman, Presidente de Contenidos de Disney Studios. "Apreciamos sus contribuciones al Universo Cinematográfico de Marvel y esperamos trabajar juntos en una serie de próximos proyectos, incluyendo la Torre del Terror de Disney".
Finalmente parece que el estudio no ha podido permitirse toda la publicidad negativa generada por el enfrentamiento judicial con una superestrella femenina con la que muchos rostros conocidos habían mostrado ya su solidaridad y empatía.
| 
Política de Privacidad
