La canción "Garota de Ipanema" ha dejado una huella imborrable en la historia musical de la década de 1960. Esta icónica canción de bossa nova, escrita por Antonio Carlos Jobim y Vinicius de Moraes, fue inspirada por una joven que caminaba por las playas de Ipanema y capturó la atención de los compositores. La musa detrás de la canción, Heloísa Eneida Menezes Paes Pinto, conocida como Helô Pinheiro, se convirtió en un símbolo de belleza y gracia. Sin embargo, la historia detrás de otra figura importante en la canción, Astrud Gilberto, revela una triste realidad de explotación y manipulación en la industria musical.

La historia de "Garota de Ipanema" se remonta a 1962, cuando Vinicius de Moraes y Antonio Carlos Jobim frecuentaban un bar en Ipanema y observaban a una joven que pasaba regularmente por allí. Inspirados por su belleza, compusieron la famosa canción. La chica resultó ser Helô Pinheiro, una joven de 17 años que se convirtió en la musa de la canción sin saberlo inicialmente. La canción se hizo popular rápidamente y fue interpretada por reconocidos artistas de la época.
La historia de Astrud Gilberto

Sin embargo, la historia de Astrud Gilberto, quien cantó la versión en inglés de la canción, revela una triste realidad detrás del éxito. Astrud Gilberto, una joven tímida de 22 años en ese momento, fue invitada a participar en la grabación de la canción mientras acompañaba a su esposo João Gilberto, reconocido guitarrista y figura clave en el desarrollo de la bossa nova. "The Girl from Ipanema" fue compuesta por Antônio Carlos Jobim y Vinícius de Moraes, y la letra fue traducida al inglés por Norman Gimbel. Astrud se ofreció a cantar en inglés y su voz seductora y susurrante le dio un encanto único a la canción.
El éxito de la canción fue innegable, pero Astrud no recibió el reconocimiento ni las compensaciones financieras que merecía. Stan Getz, el famoso saxofonista de jazz que participó en la grabación, afirmó que él y Creed Taylor, el productor, fueron los que descubrieron a Astrud y la hicieron famosa. Sin embargo, esto fue desmentido por Astrud y su hijo Marcelo, quienes afirmaron que esto era una mentira y que João Gilberto fue quien la invitó a participar.

A pesar de su contribución al éxito del álbum "Getz/Gilberto", Astrud recibió una remuneración mínima y fue estafada en términos de regalías. Mientras que João Gilberto recibió $23,000 por su trabajo en el disco, Stan Getz se llevó la mayor parte del dinero, estimado en casi un millón de dólares. Astrud solo recibió $120, la tarifa estándar del sindicato de músicos por una sesión de trabajo.
La historia personal de Astrud también estuvo llena de dificultades. Durante la gira promocional del álbum en 1964, su matrimonio con João se desmoronó debido a la infidelidad de él. Se divorciaron ese mismo año, y Astrud se encontró enfrentando la vida como madre soltera en un país extranjero, lidiando con dificultades económicas y luchando por encontrar su camino en la industria musical.

Además de las injusticias financieras, Astrud también sufrió maltrato por parte de Stan Getz, quien era conocido por su comportamiento abusivo hacia las mujeres. Getz trató a Astrud de manera despectiva y violenta, lo cual fue documentado en una biografía sobre su vida.
A pesar de todas las dificultades, la popularidad de Astrud no se desvaneció. La canción "The Girl from Ipanema" se convirtió en uno de los éxitos más grandes de la música popular y Astrud continuó su carrera como cantante. Sin embargo, su historia es un recordatorio de cómo las mujeres en la industria musical a menudo son explotadas y no reciben el reconocimiento y las recompensas que merecen. |