Johnny Depp volvió a convertirse en el inolvidable capitán Jack Sparrow, no para rodar una nueva entrega de Piratas del Caribe, sino para vivir una aventura aún más conmovedora: una visita sorpresa al Hospital Infantil Niño Jesús de Madrid.
Enfundado en el icónico atuendo del excéntrico y entrañable pirata, el actor recorrió la planta de oncología repartiendo sonrisas, ilusión y pequeños trucos de magia entre los niños y adolescentes hospitalizados.
Se detuvo habitación por habitación, interactuando con cada niño con ternura
Aprovechando un día libre durante el rodaje de Day Drinker, su nuevo proyecto cinematográfico junto a Penélope Cruz en la capital española, Depp se presentó en uno de los centros pediátricos públicos más importantes del país sin previo aviso. Su aparición, inesperada y mágica, transformó los pasillos del hospital en un escenario improvisado donde el cine y la fantasía se dieron la mano.
Durante su recorrido, se detuvo habitación por habitación, interactuando con cada niño con ternura y su característico sentido del humor. Incluso realizó algunos trucos con monedas que dejaron fascinados tanto a los pequeños pacientes como a sus familias y al personal sanitario.
La visita no pasó desapercibida. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, compartió el emotivo momento a través de sus redes sociales, mostrando imágenes de un Depp completamente entregado a su papel, esparciendo alegría allá por donde pasaba.
Deep ha llevado a Jack Sparrow a hospitales infantiles de distintos países
Este gesto no es aislado en la trayectoria del actor. A lo largo de los años, ha llevado a Jack Sparrow a hospitales infantiles de distintos países, como Estados Unidos, Reino Unido, Francia o España, convirtiendo al personaje en mucho más que una figura del cine: en un símbolo de esperanza y alegría para quienes atraviesan momentos difíciles.

El Hospital Niño Jesús, referente en oncohematología pediátrica, vivió una jornada que quedará grabada en la memoria de muchos. Una visita inesperada que demostró que el poder del cine también puede sentirse fuera de la gran pantalla, y que un simple gesto puede marcar la diferencia en la vida de un niño. |