Zachary Levi, protagonista de la película de DC "¡Shazam! La Furia de los Dioses", no se anduvo con rodeos cuando subió al escenario en la Chicago Fan Expo. Dirigiéndose a la audiencia, criticó la tendencia de Hollywood a producir contenido mediocre y exhortó a los espectadores a evitar activamente apoyar lo que él llamó películas "basura".
La frustración de Levi con la producción de la industria era palpable mientras cuestionaba la calidad del contenido que Hollywood genera. Habló sobre la disparidad entre los tráilers prometedores y las experiencias cinematográficas decepcionantes, resaltando cómo los estudios a menudo aprovechan las ventas de entradas sin cumplir con las promesas cinematográficas. El remedio, según Levi, está en manos de la audiencia: el poder de generar un cambio reside en sus elecciones.
Animó a la multitud con su apasionado llamamiento: "Tenemos que elegir activamente no consumir la basura. Ayudará. Ayudará mucho". La postura de Levi parecía reflejar su creencia en una audiencia más perspicaz, una que se niega a conformarse con ofertas mediocres.
Sin embargo, sus comentarios desencadenaron una conversación más amplia sobre la naturaleza de lo "bueno" y lo "malo" en el ámbito del entretenimiento. La disparidad entre las críticas y las puntuaciones de la audiencia, especialmente evidente en el caso de "¡Shazam! La Furia de los Dioses", subrayó la subjetividad al evaluar la calidad cinematográfica. A pesar de las críticas mixtas, la secuela obtuvo una sólida puntuación del 86 por ciento por parte de la audiencia, lo que sugiere una brecha entre críticos y cinéfilos.
El rendimiento en taquilla poco impresionante de la secuela también provocó la defensa de Levi. Reconoció imperfecciones en la película, pero la defendió firmemente como una "buena maldita película", insinuando que la desconexión entre las intenciones artísticas y la recepción de la audiencia no es infrecuente en la industria.
Los comentarios sinceros de Levi provocaron reflexiones sobre el papel de la audiencia en dar forma al futuro de Hollywood. ¿Puede una decisión colectiva de rechazar películas "basura" realmente dirigir la industria hacia estándares más altos o el problema radica más profundamente, tal vez en la forma en que se comercializan y se perciben las películas?
El destino de la calidad del contenido de Hollywood sigue siendo incierto y el debate provocado por el apasionado llamamiento de Levi continúa. A medida que la audiencia y los creadores participan en este discurso, el veredicto sobre si evitar la "basura" es la solución definitiva o si la industria necesita refinar su enfoque solo se aclarará con el tiempo. Y mientras la especulación se cierne en el horizonte, todas las miradas se dirigen hacia el impacto potencial de "Shazam 3", donde estas conversaciones podrían encontrar un nuevo capítulo. | 
U.S.A.
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