El actor Robert Pattinson empezó a hacerse mundialmente famoso a mediados de la década de 2000 tras convertirse en uno de los protagonistas de la taquillera franquicia cinematográfica 'Crepúsculo', algo que le convirtió en objeto de deseo de la mitad de las adolescentes del planeta. La presión que sufría entonces el actor era doble, ya que la prensa del corazón no paraba de acosarle por su relación con su compañera de reparto Kristen Stewart.
En noviembre de 2009, antes de que ambos admitieran su relación, concedió una entrevista a Vanity Fair en la que, además de quejarse de sus males por no poder tener citas normales como cualquier otra persona de su edad, también se sinceraba sobre lo poco que le interesaba su recién conseguida fama. "Estoy tratando de no ahogarme", aseguraba entonces. "Creo que no soy el tipo de hombre hecho para hacer una franquicia. No soy una persona muy de multitudes". Y es que en aquel momento todavía había muchas fans que expresaban su esperanza de tener algún día una oportunidad de salir con la estrella de Hollywood. De hecho, hubo una fan en particular que realmente tenía los ojos puestos en el actor.
Robert Pattinson recordó una experiencia que tuvo con una acosadora que resolvió adoptando una actitud inédita para una celebridad. "Tuve una acosadora mientras rodaba una película en España", dijo Pattinson a la revista Crème. "Se plantó en la puerta de mi apartamento todos los días durante semanas, todo el día, todos los días". Resulta que Pattinson estaba tan fatigado por su vida de soltero, que en realidad se entretuvo en una cita nocturna con la fan.
"Tuve una acosadora durante el rodaje de una película en España el año pasado", explicó Pattinson en 2009 a la revista Crème. "Se quedó fuera de mi apartamento todos los días durante semanas, todo el día, todos los días. Estaba tan solo y aburrido que salí a cenar con ella".
Por desgracia para la obsesionada fan, Pattinson no tenía reservada la primera cita de cuento de hadas que la mujer podría haber estado esperando.
"Me quejé de todo en mi vida y ella nunca volvió", explicó el actor que entonces tenía 22 años. "La gente se aburre de mí como en dos minutos".
Parece que las fans de Crepúsculo en su lugar hubieran hecho mejor en soñar con un romance con Edward Cullen.
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