Crítica de El cautivo El cautivo es un drama histórico dirigido por Alejandro Amenábar que retrata los años de cautiverio de Miguel de Cervantes en Argel tras ser capturado por corsarios en el siglo XVI. La película combina rigor histórico con un tono íntimo que explora la fragilidad y la resiliencia del escritor, mostrando cómo su ingenio y capacidad de narrar historias lo ayudaron a sobrevivir. La propuesta visual destaca por la ambientación y la fotografía cuidada, aunque el ritmo resulta irregular en algunos pasajes. Nota personal: 8 sobre 10
Personajes principales Miguel de Cervantes (Julio Peña) joven soldado español y futuro escritor que sobrevive al encierro con imaginación y resistencia Hasán Bajá (Karim Leklou) gobernador de Argel que mantiene una relación de poder ambigua con Cervantes Rodrigo Cervantes (Sergio Castellanos) hermano del protagonista que comparte parte del cautiverio Mujeres cautivas (varias actrices) personajes que ofrecen otra mirada a la vida en el presidio y acompañan el relato con sensibilidad
Rodaje y producción La película fue rodada en localizaciones de España y Marruecos, logrando recrear con verosimilitud la atmósfera de la Argel del siglo XVI y el contraste entre opresión y esperanza.
Curiosidad destacada Amenábar se atrevió a sugerir una posible relación afectiva entre Cervantes y Hasán Bajá, un enfoque inusual que abrió debate en el cine histórico español.
Película relacionada La misión (1986), otro drama histórico que reflexiona sobre fe, cultura y dignidad en un contexto de cautiverio y opresión. |