Me gustó hasta el final. El personaje de Vanessa Kirby literalmente robó a alguien y luego lo mató con su coche a propósito, y no se volvió a mencionar nada; ¡terminó con ella yéndose del pueblo! Una hora y 48 minutos de mi vida que jamás recuperaré. No recomiendo esta película. Me alegro de no haber gastado mi dinero en el cine para ver esta porquería. ¡Le daría cero estrellas si pudiera! |