La película tiene sus momentos brillantes, especialmente las escenas de acción y la evolución del personaje de Anakin. Sin embargo, el guion presenta diálogos que a veces resultan forzados y poco naturales. Aunque la trama es sólida, algunos giros narrativos se sienten predecibles. Ewan McGregor ofrece una actuación destacada como Obi-Wan, pero algunos personajes secundarios no reciben el desarrollo que merecen. En general, es una película entretenida que cierra bien la trilogía, pero podría haber profundizado más en ciertos aspectos. |