Críticas de la prensa de ZOMBI CHILD

Para adeptos al cine de raíz conceptual y vuelo sensorial (...) Cada mitad de Zombi Child contiene suficientes dosis de misterio para despertar la fascinación del cinéfilo

Es precisamente la búsqueda de otros rumbos, otros conflictos, otras sensibilidades, lo que lo convierte en un trabajo excepcional. (...) Bonello construye un film muy particular e inquietante.

Es como un sueño lúcido que se apodera de tu tallo cerebral y que no desaparece de tu cabeza cuando termina por mucho que lo intentas

Bertrand Bonello construye una historia única que versa sobre los ritos del vudú y sobre el peso de la historia del hombre blanco sobre el hombre negro

Alcanza un equilibrio inusual entre lo nuevo y lo trillado para explorar el privilegio de la cultura francesa.

Da la sensación de que son dos películas incompletas en una, y ninguna de ellas es totalmente satisfactoria. Aun así, tiene algunos momentos interesantes 

Las excelentes interpretaciones que ofrece su joven reparto, incluyendo a la novata Louimat, hacen de la película un intenso y vivaz drama cuyos únicos muertos son los zombis. 

Bonello firma una película brillante, intensamente ocultista a pesar de su simple apariencia, que emborrona las fronteras de las épocas y los mundos 

Una visión única y escalofriante de los muertos vivientes (...) Bonello juega el concepto habitual del zombie, haciendo malabarismos con los géneros 

Indudablemente, es una película de terror, aunque no de la manera que podrías esperar (...) Mucho más ambiciosa que el trabajo anterior de Bonello 

Una alegoría mitad torpe, mitad seductora (...) Puede parecer demasiado trabajada y esquemática, como si Bonello se preocupase en exceso de ofrecer su tesis, antes de confiar en su inigualable intuición 

Hay un montón de cosas en la película de Bonello, pero nunca encajan en algo que resuene (...) Parece más como un experimento que un proyecto completo, un infrecuente paso en falso para un gran director 

El resultado es, en ocasiones, demasiado académico para su propio bien (...) Al mismo tiempo, es difícil negar su poder sugestivo 

Bertrand Bonello traza un mapa donde la mirada etnográfica y la culpa ancestral convergen en un provocador intento de revisar la historia. 

La historia está más pendiente de lo climático que de lo narrativo y hace un buen trabajo en la ambientación de lo atávico en Haiti y de lo moderno en París (...) Al guion le falta alguna especia, algo picante en su argumento 

Con un hipnótico exorcismo de estilo, Bonello vuelve a las raíces sensoriales de su cine con un relato de terror que es su mejor película desde 'De la guerra' (...) una historia de terror feminista, contestataria, hipnótica y sensual 

Un quiero y no puedo más fallido que otra cosa (...) Los materiales utilizados tenían papeletas para construir con ellos una obra de fuerte originalidad, pero su conjugación visual solo da cuenta de un digno fracaso. 

Es una muy impactante y atrevida mirada también al uso de las culturas tercermundistas (en este caso, afrocaribeñas) en la vida actual, pero en versiones banalizadas y degradadas por el consumo masivo. 

Es deslumbrante la fluidez con la que Bonello, (...), es capaz de saltar del pasado al presente y de una cultura a otra: (...) con un entierro prematuro hecho a puro cine, sin otros recursos que no sean los de la luz, el montaje y el sonido. 

Es una obra sugestiva que va más allá del género en el que en primera instancia se le podría alinear. Se pasea por el terror, la fantasía y el drama, sin subestimar los códigos del concepto que le sirve como base. 

Aunque formalmente no es tan elegante ni fluida como otras de Bonello, es un intento valioso para pensar la relación entre Francia y sus antiguas colonias, y el contraste entre una visión racional de la vida y una abierta a lo divino y lo mágico.