Película de cine palomitero plagada de acción y diversión. Casi milagrosamente, el director Matthew Vaughn consigue mantener el tono adecuado en todo momento, gracias sobre todo a una puesta en escena que dota de elegancia al conjunto y al acertar plenamente en la elección de protagonistas. Taron Egerton es toda una revelación, Colin Firth está al nivel de los mejores papeles de su carrera y Samuel L. Jackson borda su papel de villano - atención a su peculiar dicción -. Un estupendo entretenimiento que funciona igual de bien tanto en su vertiente cómica como en la de acción. Recomendada. |