Inexplicablemente los rumores apuntan a que podría ser nominada a múltiples oscars; y digo inexplicablemente porque, a pesar del buen trabajo de su protagonista - Jack O’Connell - y del ritmo más clásico y pausado con que está rodada la película, el relato se hace rutinario y alargado - y eso que los hermanos Cohen participaron en la elaboración del guión -, con una Angelina Jolie que, en su debut tras las cámaras, no consigue evitar que la puesta en escena resulte excesivamente convencional. Las motivaciones del protagonista nunca son tratadas con la suficiente profundidad y la duración resulta desmesurada. El excelente acabado técnico (¿acaso hay alguna película de Hollywood que no lo tenga hoy en día?) no impide que estemos ante una película fallida. |