Esta es la primera película hablada de Charles Chaplin y en ella el autor se enfrenta a uno de los temas más preocupantes de aquella época: el auge de los totalitarismos y la expansión del fascismo a Europa. El cineasta parodia la figura de Hitler para crear un cóctel de drama, comedia y tragedia que retrata la siniestra figura de un hombre que se cree un superhéroe y que piensa que sólo su opinión tiene valor. Un canto a la esperanza, la democracia, la paz y la libertad. El filme contiene varias de las escenas más memorables de la Filmografía de Chaplin aunque la más recordada sea la del discurso final. Gran película. |