Barry Seal es un piloto vocacional que aprovecha su posición para convertirse en una especie de "Yojimbo" (1961) entre dos bandos: los narcos de Pablo Escobar y un servicio de inteligencia estadounidense. Cruise interpreta magistralmente a Seal, un truhán, mezcla de tarugo e ingenuo, siempre mezclado en negocios turbios. Resultan afortunados esos guiños que rompen la cuarta pared en un conjunto que funciona muy bien gracias a un guión muy bien estructurado y un rodaje creíble con un estilo de cámara en mano. Con todo, lo más destacable es el humor que supura todo el metraje, que trata toda una espiral de momentos oscuros con innegable socarronería. El mejor Tom Cruise desde 'El filo del mañana'. |