15 años después, Warren Beatty regresa a las pantallas para dirigir y protagonizar esta crónica del periodo más oscuro de la vida del cineasta Howard Hughes. El problema es que el guión nunca parece decantarse por el tipo de relato que quiere contar ¿comedia romántica? ¿sátira? ¿biopic? Esta dispersión narrativa sólo encuentra un punto de interés en las excentricidades del protagonista; el problema es que ya las vimos mejor y con mayor impacto dramático en 'El aviador'. Si a estos problemas les sumamos una puesta en escena bastante estática y un montaje manifiestamente mejorable, acabamos encontrándonos con un agotador quiero y no puedo.