Secuela tardía de la estimable Jumanji, un filme de los años 90 que con el tiempo se ha ido convirtiendo en una película de culto. Aquí se respeta bastante la mitología de la original aunque cambiando el juego de mesa por un videojuego - aquí los protagonistas adoptarán en consecuencia el aspecto de personajes de los videojuegos de antaño-. La cinta resulta muy dinámica, una sucesión de locas aventuras digeribles por todos los públicos, con unos personajes que se van enfrentando a diferentes pantallas cada vez más difíciles para que el viaje no decaiga. Todos los actores muestran una inspirada vis cómica aunque lamentablemente el villano interpretado por Bobby Cannavale no está a su altura. En el aspecto visual el filme funciona muy bien. Un digno entretenimiento respetuoso con las directrices de la película original. |