El argumento de 'Jupiter Ascending' nos habla de una chica que se gana la vida limpiando retretes -interpretada por Mila Kunis- sin mayores aspiraciones, aunque sin saberlo posee el código genético perfecto, propio de la Reina del Universo, algo que amenaza el orden establecido desde las altas jerarquías del poder.
Dirigida por los hermanos Wachowski, autores asimismo de un guión sencillo que se empeñan en complicar de forma innecesaria. Rodada con el particular e inconfundible acabado visual de los Wachowski ('Matrix') y con unas escenas de acción muy bien rodadas, 'El destino de Júpiter' se convierte en un disparate francamente espectacular y entretenido. Eso sí, si esperas alguna buena actuación tendrás que buscarla en otro título de la cartelera: entre Tatum y Kunis la química es nula y lo de Eddie Redmayne, con un papel de villano que oscila por momentos entre lo cansino y lo ridículo, es como para que lo nominen al Razzie.