Michael Reynolds es un joven y rico doctor de Los Angeles cuya única preocupación es promocionarse y comprar una lujosa casa para su familia. A Reynolds le asignan un nuevo paciente, Brandon Monroe, un joven convicto de 16 años. Brandon es miembro de una tribu cherokee y asesinó a su propio padrastro, tiene un cáncer terminal y está resentido con los privilegiados doctores que le atienden, llegando incluso a golpearlos. Un día Brandon consigue hacerse con un arma y secuestar al doctor Reynolds.
Cimino reflexiona de nuevo sobre la conciencia y la cultura estadounidense por medio de una puesta en escena contundente y de un sencillo relato: un médico se ve secuestrado por un indio navajo enfermo terminal. Como toda road movie que se precie, el viaje que ambos emprenden será tanto físico como emocional. Interesante