Narra el suceso de los bomberos que perdieron la vida el pasado 2013 en el incendio de Prescott, Arizona. La mayor tragedia para los bomberos americanos desde el 11 de septiembre, de los veinte hombres del grupo, sólo uno sobrevivió.
La trágica historia real del cuerpo de bomberos de Granite Mountain recibe un tratamiento brillante y a menudo poderoso, pero sufre de destellos de clichés excesivamente sentimentales
Cierto que los perfiles de casi todos ellos pecan de familiares, y que la narración es previsible de principio a fin, pero la película logra colarse entre las grietas de esas convenciones para hallar la humanidad de sus héroes.
Encomiable labor de equilibrio tonal entre la obligada espectacularidad de buena parte del metraje y otras suficientemente emotivas (...) película bastante más humana y verosímil de lo que en principio cabría esperar