Fernando y Margarita son una pareja que vive en un hogar en el que él manda y ella obedece. De aquí nace un juego perverso en el que Fernando propone y Margarita acepta. Los dos llevarán este juego hasta sus últimas consecuencias.
Pese a su cuidada estética y fotografía, el filme se antoja como excesivamente teatral. La temática de la denominada "violéncia de género" se recorre aquí en todos sus estadios: desde el comentario insignificante hasta el brutal desenlace del filme. Aquí te das cuenta de que un maltratador puede ser un tipo perfectamente amable, ese señor simpático que siempre te saluda en el portal...