La película pone en relación al protagonista, Pacifico, con la memoria histórica del paisaje donde vive y trabaja, los Alpes Apuanos. Las montañas por donde se mueve fueron refugio de los partisanos que lucharon contra los nazis. Pero ahora también es un joven alemán quien está a punto de adquirir su casa. De manera que el film acaba articulando una mirada no exenta de ironía sobre las relaciones entre Italia y Alemania desde la Segunda Guerra Mundial. |