Serie de TV - Tras asistir a un acto institucional junto a su esposa Ana Chantalle, el presidente del Gobierno Alberto Guzmán mantiene un encuentro íntimo con su jefa de comunicación, Paula Campillo, en la habitación de un hotel. La velada da un giro dramático cuando Alberto sufre un inesperado ataque al corazón, debido a que alguien ha puesto cianuro en la copa del primer mandatario del país. Se desata así una crisis de Estado en el que la pasión y la erótica del poder desatan una lucha de intereses personales que acaban convirtiéndose en secretos de Estado.
Transmite tanta falsedad, tanto cartón piedra, en las actuaciones, la trama, los diálogos, en todo, que es imposible llegar a entrar en la historia y engancharse a los personajes.
Peca de surrealista y artificial pero en ella destaca el reparto femenino (...) La premisa inicial de 'Secretos de Estado' es potente (...) ¿El problema, entonces? Está todo mal ejecutado.
Es tan mala como nos temíamos (...) Un culebrón que ha costado un pico y que tiene errores amateur (...) y tiene algunas buenas ideas, pero pobremente ejecutadas. Hace buena a 'Ingobernable', que ya es decir.