Hacia la libertad • Crítica

¿De qué trata?

Escrita por Bill Collage, 'Hacia la libertad' es una película que hace especial énfasis en la acción y trata sobre la historia real de Gordon, un hombre esclavizado conocido como "Whipped Peter". Una foto de su espalda terriblemente lacerada fue tomada en un campamento del ejército de la Unión en Baton Rouge, Luisiana, en 1863 y circuló en muchos periódicos y revistas. La imagen espoleó a los norteños reacios a hablar contra la esclavitud durante la Guerra Civil. Pero antes de que Gordon se convirtiera en el rostro de un movimiento y en miembro del ejército de la Unión, era un hombre que buscaba la libertad.

Gordon, al que renombran como Peter en la película, es interpretado por Will Smith, un actor cuyo último año ha estado definido por una penosa gira de arrepentimiento después de que abofeteara a Chris Rock durante la ceremonia de los Óscar.

A pesar del lastre de un guion bastante escaso y carente de mordacidad, Smith ofrece una interpretación marcada por sus expresiones faciales y un acento haitiano que transmiten la dureza de la vida de Peter, mientras que una pose erguida muestra la inquebrantable autoestima del personaje.

La película se abre con una tierna escena doméstica, que muestra la relación de Peter con su esposa, Dodienne (Charmaine Bingwa), sus hijos y su fe. Este momento se ve interrumpido cuando los capataces de la plantación irrumpen en su cabaña para llevarse a Peter: Ha sido vendido a un campo de trabajo del ejército confederado, donde, junto con otros cientos de esclavos, es obligado a trabajar en un ferrocarril. El tono de la película se define por estos cambios bruscos entre momentos íntimos y violentos.

En el campo, la capacidad de Peter para mirar a los ojos a los capataces mientras le apuntan con el cañón de una pistola, unido a su rebeldía ante la injusticia, lo convierten pronto en un símbolo de rebeldía y coraje. Por eso, cuando escucha a uno de los capataces blancos hablar de la liberación de los esclavos por parte de Lincoln, decide convencer a un grupo de otros hombres esclavos para que se unan a él en una fuga a Baton Rouge, en un viaje de cinco días que requerirá atravesar los peligrosos pantanos de Luisiana.

La fotografía de Robert Richardson nos muestra el mundo de Peter como un gris sombrío. Añade un aire desanimado a lo que el propio Smith definió como una "película sobre la libertad". También dificulta discernir a Peter cuando corre por el bosque de coníferas, se sumerge en el agua turbia del pantano y se esconde en los gruesos troncos de los altísimos árboles.

La mayor parte de las dos horas largas que dura 'Hacia la libertad' muestran el viaje de Peter a través de los pantanos mientras huye de Fassel (Ben Foster), que es el supervisor del campo de trabajo. El éxito de este último a la hora de atrapar a los fugitivos, según descubrimos más adelante, proviene de una dura lección de la infancia: cuando el padre de Fassel comprendió que su hijo se había hecho amigo de su cuidadora, una joven esclava, el hombre la mató delante de los ojos del chico. Fassel interiorizó la decepción de su padre, y lo que empezó como una vergüenza se cristalizó en algo que la película nos presenta como un odio complicado.

Fassel, a diferencia de los otros supervisores blancos del campo, ve a los hombres esclavizados -y especialmente a los fugitivos- como persistentes e inteligentes. No está claro cómo quiere el director Fuqua que los espectadores procesemos esta información, pero parece que debemos entender que Fassel, en algunos niveles, respeta a Peter, añadiendo otra capa a su peligroso juego del gato y el ratón.

Personajes

Dirección

Antoine Fuqua se las arregla para implicar al espectador en su historia con una película de terror y supervivencia rodada la mayor parte del tiempo en blanco y negro, con ocasionales salpicaduras de tonos más ricos, como un estallido naranja cuando se dispara un cañón, y alguna toma más tradicional en color. Sospecho que rodar la película de una forma más tradicional hubiera resultado demasiado violenta para la mayoría del público.

¿Merece la pena verla?

La esclavitud ha sido uno de los peores pecados de los Estados Unidos y la película de Fuqua te somete a los horrores de los que la sufrieron y a sus ardientes deseos de libertad. Es una película que levanta el ánimo, llena de fe, heroísmo y la voluntad de confiar en que las cosas cambiarán.

Lo mejor

Smith está estupendo en el papel de un esclavo que consigue su libertad en la Luisiana de 1860. Si alguna película puede hacernos perdonarle la infame bofetada, podría ser ésta.

Lo peor

La falta de contexto, de un mundo interior para que el héroe llevara a cabo su gran hazaña. No se evocan anécdotas ni recuerdos de sus padres, o de cómo se enamoró de Dodienne.

La película no puede evitar discurrir por los trillados tropos de las historias sobre la esclavitud ni tampoco ofrecer una nueva perspectiva de las mismas.

Nota