Así son los sueldos millonarios de 'La familia de la tele'

Pese a ser una de las grandes apuestas de RTVE para revitalizar las tardes de La 1, La familia de la tele no ha logrado el impacto esperado en sus primeras semanas de emisión. El nuevo magacín, producido por La Osa Producciones, arrancó con un ambicioso plan de 65 entregas y un coste máximo de más de 6 millones de euros. Sin embargo, los retrasos en el estreno redujeron la cifra de programas a 57, aunque el presupuesto completo se mantuvo.

El magacín nació con una cláusula clara en su contrato: debía alcanzar al menos un 8% de cuota de pantalla para evitar modificaciones drásticas en su emisión. Si durante diez capítulos consecutivos no se superaba ese umbral, RTVE se reservaba el derecho de alterar horarios, reestructurar el formato o incluso cancelar el proyecto. Aunque el contenedor del programa —que incluye espacios como Valle Salvaje y La promesa— logra mantenerse por encima de ese 8% (el mínimo fue un 8,4% el 28 de mayo), los tramos exclusivos de La familia de la tele no alcanzan esa marca, lo que ha llevado a constantes ajustes en la programación.

Presupuestos y sueldos: un desglose detallado

Según los documentos revelados, el contrato entre RTVE y La Osa Producciones estableció un coste total de 6.052.299,73 euros (IVA incluido), lo que supone aproximadamente 87.752 euros por emisión. No obstante, con el número final de entregas reducido a 57, el coste por programa ha aumentado hasta los 96.937 euros.

Más de la mitad del presupuesto total —unos 3,4 millones de euros— se destina a sueldos del personal artístico y técnico. Los presentadores, cuyo número contractual asciende a seis aunque oficialmente sólo se han anunciado tres (María Patiño, Inés Hernand y Aitor Albizua), cobran entre 950 y 1.616 euros por entrega. Esto supondría una cifra total de hasta 552.900 euros solo en salarios para este grupo.

Los colaboradores habituales, hasta ocho por contrato, reciben entre 950 y 1.150 euros por programa, lo que suma un total máximo de 524.400 euros por los 57 capítulos previstos. A su vez, los invitados diarios —un máximo de dos por entrega— cobran 2.000 euros cada uno por su participación.

Otros gastos vinculados al personal artístico incluyen traslados (300 euros por cabeza para un presentador y tres colaboradores), alojamiento (120 euros por persona) y dietas, que alcanzan un total de 204.111,71 euros.

Dirección, equipo técnico y producción

El organigrama del programa incluye dos directores, que perciben 8.750 euros mensuales, y cuatro subdirectores con un salario mensual de 5.000 euros. El equipo técnico y creativo lo completan tres documentalistas, un coordinador de guion, nueve guionistas, 12 redactores, cinco reporteros, otros dos repartidos entre Barcelona y Sevilla, cuatro becarios de redacción y tres coordinadores. No se han revelado sus remuneraciones exactas.

Por parte de RTVE, la colaboración incluye un director de contenidos, personal de producción, cámaras, realizadores, técnicos de iluminación, regidores y recursos materiales como vestuario y archivo.

Escenografía y costes adicionales

La inversión en escenografía también ha sido considerable. La construcción del barrio de Bellavista, el decorado principal del plató, tuvo un coste de 365.822 euros. A esto se suma la puesta de largo del programa con El gran desfile, cuyo coste total fue de 440.044,08 euros, después de haber sido reprogramado por imprevistos como el fallecimiento del Papa Francisco y un apagón técnico. Los pilotos iniciales no emitidos costaron 275.000 euros.

Una apuesta de exclusividad y reajustes

El contrato impone una cláusula de exclusividad a sus principales figuras, impidiéndoles trabajar en otras cadenas nacionales durante el periodo de emisión, salvo acuerdo expreso con la productora. Esto ha permitido colaboraciones puntuales con espacios como Tentáculos, lo que explica apariciones de rostros como Carlota Corredera o Kiko Matamoros.

La familia de la tele continúa en antena bajo observación, con un elevado coste por episodio y un reparto de sueldos que ha generado controversia, especialmente al contrastarlo con unas audiencias que aún no justifican la inversión. RTVE, mientras tanto, sigue ajustando su estrategia para intentar revitalizar el programa antes de que se cumpla la cláusula crítica de los diez capítulos con baja audiencia.