Emilia Jones hizo historia anoche al convertirse en la protagonista de la primera película en streaming que gana el premio Oscar a la Mejor Película.
Emilia Jones, nacida en Londres, de 20 años, hizo su debut profesional en el escenario en el musical Shrek a la edad de ocho años, con la estrella del espectáculo Amanda Holden cuidando de ella como un hada madrina benevolente.
Ahora, una década más tarde, se codea con las estrellas de Hollywood después de que la película de cine indie CODA fuera nombrada mejor película en los Oscar.
La estrella adolescente no solo tuvo que dominar el lenguaje de signos americano y el acento americano para el papel, sino que también tuvo que aprender a capitanear un barco de pesca y tomar clases de canto.
La revista Vogue ya había calificado a Emilia como "la estrella revelación de 2022". Sin embargo, su increíble talento le viene de familia: su padre es Aled Jones, que alcanzó la fama como niño soprano dotado y más tarde como presentador de televisión, artista discográfico y concertista. Su madre, Claire Fossett, fue trapecista.
La carrera de actriz de Emilia empezó cuando apenas contaba ocho años, cuando consiguió pequeños papeles en las películas 'One Day (Siempre el mismo día)' y 'Piratas del Caribe: En mareas misteriosas'.
Más tarde fue elogiada por un pequeño papel en un episodio de 'Doctor Who'.
Emilia nunca se planteó una carrera de cantante como la de su padre: "Mi corazón siempre estuvo en la actuación", declaró en cierta ocasión.
"Mi madre es bastante tímida, pero no creo que renuncie a nada. Cuando era más joven estaba en el circo. Hacía el trapecio; tenía que ser fuerte para hacerlo".
'Y mi padre trabajó desde muy joven. Tenemos eso en común".
Ese mismo año debutó en el teatro interpretando a la princesa Fiona en el reparto original de Shrek the Musical en Londres. Su padre se quedó impresionado por su actuación: "Es un pequeño cohete. No le asusta nada. Es lo que quiere hacer, ¿quién soy yo para detenerla? Sólo me preocupa porque no quiero que consiga un trabajo -o que no lo consiga- por mi culpa".
Más tarde participaría en una adaptación teatral de 'Una vuelta de tuerca' de Henry James.
En diciembre de 2018, le llegó su gran oportunidad al ser elegida para interpretar a Kinsey Locke, uno de los personajes principales de la serie de fantasía de Netflix 'Locke & Key'.
A Emilia le atrajo el papel de Kinsey por la posibilidad de poder interpretar a dos versiones del mismo personaje: Kinsey antes de quitarse el miedo y Kinsey después de quitarse el miedo.
Poco después consiguió el papel de Ruby Rossi en 'CODA', de Apple TV+, como la única miembro de una familia de sordos que puede oír y que sueña con ir a Berkley.
Para su audición, la joven actriz interpretó la suave balada Landslide de Fleetwood Mac, acompañándose a sí misma con la guitarra.
Para interpretar el papel, Jones pasó nueve meses durante el rodaje de Locke & Key aprendiendo el lenguaje de signos, al tiempo que también aprendía a manejar un barco pesquero. "Me entrené durante nueve meses para trabajar en el lenguaje de signos y en el canto. Fue un trabajo muy duro, pero fue muy gratificante cuando terminé".
"CODA significa hijo de adultos sordos y mi personaje, Ruby, es una CODA. Hablé con muchos CODA para prepararme, porque estoy representando a una comunidad a la que no pertenezco, así que quería hacerlo con precisión".
Emilia es una gran amante de los animales y la experiencia de llevar un barco pesquero le resultó perturbadora. Rescataba un pez y los pescadores de verdad se daban la vuelta, sacudían la cabeza y decían: "Eso es dinero". La tripulación le enseñó a revisar las langostas, en busca de hembras con huevos.
Emilia no estaba tan segura de la faceta de cantante del papel. En la película, Ruby se une al club del coro de la escuela como una forma de conseguir un respiro de su familia.
Y aunque Jones sabe cantar -"canté en Shrek"-, nunca había recibido formación. "Lo cual fue desalentador. Tenía 17 años cuando rodé esta película. Estaba un poco nerviosa".
Emilia cuenta que su padre ha visto la película varias veces, y que en todas ellas ha llorado.
Pero a pesar de proceder de "un hogar musical" -durante el encierro por la pandemia, ella y su padre (una vez que se les permitía salir de casa) salían de paseo en coche "donde cantábamos juntos"-, Emilia nunca se planteó hacer carrera en ese campo. "Mi corazón siempre estuvo en la actuación".
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