Con más de 40 trabajos como actor y más de 12.000 millones de dólares de recaudación en todo el mundo, Tom Cruise es sin duda una de las estrellas de cine más grandes y rentables de su generación o de cualquier otra. Si algo lo ha reafirmado es el éxito fenomenal que su secuela, Top Gun: Maverick, obtuvo el año pasado. La película se ha convertido en el proyecto más taquillero del actor, con más de 1.400 millones de dólares en todo el mundo, ha recibido elogios casi unánimes de crítica y público y ha sido nominada al Globo de Oro a la mejor película. Nada mal para un veterano de 40 años de la gran pantalla que acaba de entrar en su sexta década.
Pero a pesar de todo el éxito de Cruise en Hollywood, hay una hazaña en particular que aún no ha conquistado: el Oscar. Aunque siempre ha sido un actor de talento, con interpretaciones siempre potentes y un impresionante nivel de versatilidad en su oficio, la Academia sólo le ha nominado para la codiciada estatuilla dorada. Puede ser fácil o tentador dar por sentado que un actor tiene una impresionante lista de éxitos de taquilla y un estatus de primer nivel en la industria desde hace décadas. Ese estrellato puede eclipsar la capacidad del público para recordar que un determinado intérprete sigue ejerciendo un gran poder e influencia a la hora de suspender la incredulidad, y Cruise no es una excepción.
Nominaciones anteriores de Tom Cruise a los Oscar
Su primera nominación llegó a principios de 1990, cuando optó al premio al mejor actor por interpretar a Ron Kovic, un veterano de la guerra de Vietnam, en Nacido el 4 de julio, de Oliver Stone. Con este papel, ascendió al siguiente escalón de su carrera al abordar una desgarradora descripción de las experiencias y luchas de Kovic en tiempos de guerra tras sufrir una lesión que le dejó paralítico. Aunque el actor ya había demostrado su fuerza dramática en películas anteriores como El color del dinero y Rain Man, en la película de Stone Cruise utilizaría nuevos recursos de su arsenal interpretativo. En lo que quizá sea el elogio más reverencial que ha recibido el actor, Roger Ebert destacó la capacidad de Cruise para estirarse y evolucionar al escribir en su crítica de la película: "Nada de lo que Cruise ha hecho te preparará para lo que hace en Nacido el 4 de julio".
Consiguió su segunda nominación al premio al mejor actor siete años después con la exitosa comedia dramática Jerry Maguire. Interpretando a un agente deportivo ingenioso y dicharachero, Cruise hizo uno de sus papeles más memorables, aportando un sentido del humor desenfadado y cercano a la película de Cameron Crowe. También demostró una vez más que tenía un gran talento dramático al explorar de forma convincente la crisis de conciencia y la lucha existencial de un hombre en una industria despiadada. Aunque una vez más se fue de la ceremonia de los Oscar con las manos vacías, consiguió su segundo Globo de Oro por Jerry Maguire.
Unos años más tarde se estrenó Magnolia, el drama épico de Paul Thomas Anderson. En un movimiento inusual para Cruise, en lugar de encabezar una película, se unió a un grupo de talentosos intérpretes y se labró su propio rincón convincente de la narración con el personaje de Frank T.J. Mackey. Mackey es quizá uno de los personajes más misóginos, groseros y desagradables del cine moderno. Al mismo tiempo, gracias al guión de Anderson y a la intrépida interpretación de Cruise, el complejo personaje resulta totalmente magnético y el público puede empatizar con él. Al igual que en Nacido el 4 de julio y Jerry Maguire, ganó un Globo de Oro (desde entonces ha devuelto sus premios a la HFPA) por interpretar a Mackey, pero no pudo llevarse a casa el Oscar al mejor actor de reparto.
El estrellato de Tom Cruise nos hace olvidar su talento
Las más de 40 películas que Cruise ha protagonizado contienen un gran número de grandes interpretaciones del veterano actor. De Risky Business a A Few Good Men y de Eyes Wide Shut a Collateral, ha interpretado personajes que van desde el chico de la puerta de al lado a un asesino a sangre fría. Aunque Top Gun le catapultó a la estratosfera como celebridad internacional a los 24 años, desde entonces Cruise ha mantenido los pies en la tierra y ha sido versátil a la hora de buscar papeles y material que desafíen sus habilidades como actor.
En 2022, sin embargo, gracias en gran parte a la franquicia de Misión Imposible y a su envidiable cualidad de envejecer como un buen vino con cada nueva entrega, la superestrella se ha hecho más conocida entre el público como un héroe de acción de primera categoría que como el talentoso actor que siempre ha sido. Cuando no está desafiando a la gravedad, aguantando la respiración durante un tiempo impensable o realizando actividades que sólo un puñado de los más atrevidos adictos a la adrenalina podrían soñar, nos recuerda sistemática y sinceramente que la acción y las acrobacias son la guinda del pastel.
¿Podría 'Top Gun: Maverick' podría darle a Cruise su primer Oscar?
Después de décadas de planes para una continuación de Top Gun, y de que el estreno de la secuela se retrasara varias veces, es seguro asumir que nadie pensó que Top Gun: Maverick tendría el éxito que ha tenido. Desafió y superó con creces las expectativas comerciales, de crítica y de público. Es una película que muchos espectadores simplemente no sabían que querían. Y hace sólo unos días, en otro hito inesperado de la extraordinaria trayectoria de la película, recibió una nominación al Globo de Oro a la mejor película dramática. Aunque no es inaudito que las superproducciones más taquilleras reciban este tipo de reconocimiento (Avatar: La forma del agua también obtuvo la misma nominación), hay que reconocer que el circuito de premios, que tiende a centrarse en el reconocimiento del cine menos convencional, destaque la última atracción de Tom Cruise.
Es muy probable que la película reciba nominaciones en las categorías técnicas (sonido, efectos visuales, montaje, fotografía), la posibilidad de que Cruise consiga una nominación al mejor actor es menos segura tras su reciente desaire por parte de la HFPA en los próximos Globos de Oro. Sin embargo, tal reconocimiento sería un justo homenaje al actor y a su esperada reedición de un personaje entrañable. Su interpretación en la película, llena de reverencia por lo que vino antes y reconociendo con sensibilidad el paso del tiempo, eleva enormemente el impacto narrativo de Maverick y lo impregna de un núcleo emocional que no suele encontrarse en las películas llenas de acción. Si el actor consigue su primer Oscar por una película como Top Gun: Maverick parece una posibilidad remota, conviene recordar que, antes de su estreno el 27 de mayo de este año, la idea de que se convertiría en una de las películas más taquilleras de todos los tiempos también era descabellada. |
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