Denzel Washington, el reconocido actor de Hollywood, se ha abierto sobre los efectos de su relación pasada con las drogas y el alcohol, reflexionando sobre cómo esas experiencias han marcado su vida, ahora que está a punto de cumplir 70 años. En una reciente entrevista con Esquire, el actor de 'Gladiator 2' compartió sus pensamientos sobre el daño que ha causado a su cuerpo y cómo se enfrenta al "último capítulo" de su existencia.
Washington ha sido claro al admitir que el vino fue su gran vicio. A lo largo de los años, se convirtió en una presencia constante en su vida, aunque nunca se sintió atrapado por drogas duras como la heroína o la cocaína. "El vino es muy traicionero", explicó, "va muy lento. No es como si te emborracharas de inmediato". A pesar de haber consumido todo tipo de sustancias, incluyendo el uso de drogas intravenosas en su juventud, Washington nunca se consideró un adicto. El vino, sin embargo, fue una historia diferente. Con el tiempo, comenzó a disfrutar de vinos de gran calidad, incluso llegando a ordenar botellas de 4.000 dólares, lo que le permitió experimentar una relación más sofisticada con el alcohol.

El actor también destacó que, aunque su consumo de vino era regular, siempre se mantenía sobrio durante sus períodos de trabajo. “Nunca bebí mientras trabajaba o me preparaba para un papel. Me limpiaba y luego volvía a rodar, podía hacer ambas cosas. Pero después de un largo rodaje, era momento de volver a beber por tres meses”, contó. Durante ese tiempo, en su vida personal, mantenía su consumo bajo control: siempre pedía dos botellas, sabiendo que si compraba más, bebería más.
Hoy, Washington se encuentra a diez años de su último trago, y con la llegada de los 70, reflexiona sobre su futuro. "He hecho mucho daño a mi cuerpo", reconoce, pero también está agradecido por la oportunidad de haber llegado a esta nueva etapa de su vida. A pesar de que no sabe cuánto tiempo le queda, se siente optimista. "Si me quedan treinta años, ¿qué quiero hacer?", se pregunta, recordando la longevidad de su madre, quien vivió hasta los 97 años. "Estoy haciendo lo mejor que puedo", concluye el actor, quien se siente agradecido por las lecciones que ha aprendido y por la oportunidad de disfrutar de los años que le quedan.

|