La supermodelo y estrella del reality show Heidi Klum se lleva el trofeo al disfraz de celebridad más comentado de 2022 con el hiperrealista conjunto de "gusano de la lluvia" que lució en su 21ª fiesta anual de Halloween, celebrada el 31 de octubre en Nueva York.
El traje -un sarcófago anillado del que sólo se veían los ojos y la boca de Klum- parecía lo que podría ocurrir si el Hombre Michelín se aparease con un Slim Jim. Al instante, las redes sociales se incendiaron, provocando diversión, confusión y repulsión a partes iguales. Para algunos, fue aclamado como una obra maestra del arte de la performance; otros lo vieron y exigieron que lo mataran al instante con fuego.
Sin embargo, sea cual sea la opinión de cada uno, resultaba imposible apartar la vista del gusano.
¿De dónde pudo salir semejante monstruosidad? Para obtener esas respuestas, The Hollywood Reporter fue directamente a la fuente: La propia Klum y Mike Marino, propietario de Prosthetic Renaissance, la empresa de efectos especiales que produjo ese look de Halloween para ella y muchos otros, como Jessica Rabbit (2015), una anciana con varices (2013) y el hombre lobo de "Thriller" (2017).
La idea se le ocurrió a Klum hace muchos meses, cuando empezó a pensar en su fiesta de Halloween. La fiesta se había cancelado los dos años anteriores debido a la pandemia de COVID-19, así que Klum sabía que tenía que volver con algo realmente llamativo.
"Quería ser algo diferente e inesperado", dice Klum.
Describió su visión de transformarse en un invertebrado tubular, atado a un hilo de pescar sostenido por su marido, el músico Tom Kaulitz, que se vestiría de pescador. La primera reacción de Marino fue que la idea no era viable: para una película, claro, pero no para una fiesta.
"No creí que fuera posible", dice. "La idea de los disfraces era tan grande y tenía que ocurrir en tiempo real, sin cortes para la segunda toma. No tenía confianza en lograrlo".
Pero Klum, de 49 años, confiaba en sus habilidades y no aceptaba un no por respuesta. Marino se puso en la mesa de dibujo y esbozó un gusano de tamaño humano con la ayuda de su colaborador, Paul Komoda. Otro artista, Jerry Constantine, utilizó un escáner del cuerpo de Klum y elaboró un modelo de gusano tridimensional que pudiera envolverla.
Bill Bryan, un veterano fabricante de marionetas y trajes para criaturas, creó entonces un prototipo de gusano con fabricación de espuma.
"Bill pegó piezas de espuma para crear la forma y luego la forró con spandex y tubos de plástico", dice Marino. "Luego, una vez que conseguimos la forma hasta un punto en el que me gustaba, fabricamos con látex de espuma para crear la piel con detalle".
Se tomó un segundo escáner 3D más detallado de la cara de Klum y se utilizó para crear la sección de ojos y boca, que finalmente se moldeó en silicona. "Una vez construido el traje, le pusimos la cremallera a Heidi y la ocultamos, luego pegué los aparatos faciales y pinté", dice.
Todo el proceso duró cuatro meses de perfeccionamiento y desarrollo. Luego, la mañana de Halloween, comenzó la aplicación final. "Empezamos a las 11 de la mañana y probablemente llegué a la alfombra sobre las 11 de la noche", dice Klum. A Marino le preocupaba cómo le iría a Klum dentro del restrictivo traje de gusano.
"Un traje así puede ser claustrofóbico porque no tienes acceso a tus manos y tus pies están muy limitados", dice. "Pero Heidi en realidad quería eso porque quería sentirse más 'gusano'".
Al final, Marino tenía razón. "Me sentía muy claustrofóbica con ese traje", dice Klum. "Una cosa es añadir prótesis a tu cuerpo - pero estar metida dentro del cuerpo del gusano y no poder usar realmente mis brazos o pies no era muy cómodo. Pero Halloween no es una cuestión de comodidad". | 
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