Christina Ricci lleva décadas trabajando en Hollywood como actriz. Conocida sobre todo por interpretar a personajes de carácter más oscuro, como Elizabeth, en Nación Prozac, y Selby Wall, en Monster, la carrera de Ricci comenzó a principios de los noventa, cuando conquistó los corazones de muchos con su interpretación de Miércoles Addams y apareció en un vídeo musical para la canción de Cher The Shoop Shoop Song (It's in His Kiss). Su carrera floreció lo suficiente como para obtener papeles al lado de actores de la talla de Johnny Depp y Samuel L. Jackson.
Desde el comienzo de su carrera, Ricci no ha dejado de trabajar en papeles grandes y pequeños en películas de gran presupuesto e independientes, así como en papeles televisivos, doblaje y continuas apariciones en vídeos musicales. A los fans de Christina Ricci les entusiasmó saber que aparece en Matrix: Resurrections y tenían curiosidad por saber el aspecto que tendría en la película.
El gran cambio físico de Christina Ricci en Matrix: Resurrections
En la tardía cuarta entrega de la saga Matrix, Ricci aparece brevemente en pantalla y, aunque no tiene muchas líneas, su personaje resulta realmente memorable. Ricci interpreta a Gwyn de Vere, que se cree que es un juego de palabras con el nombre de Ginebra (Guinevere en inglés) de la leyenda artúrica, una ejecutiva de la empresa de juegos que aparece en la película.
Gwyn aparece en la película poco después de que Thomas, alias Neo, reciba la noticia de que debe hacer un juego de Matrix 4, o corre el riesgo de incumplir su contrato de trabajo con la empresa. La actriz luce un corte de pelo estrafalario con un estilo cercano al de los personajes del anime, en las antípodas del recatado peinado que muestra en la serie 'Miércoles Addams' de Netflix.
Gwyn dirige la reunión y comenta lo emocionada que está por trabajar en la próxima entrega del "juego que tanto cambió las reglas del juego". Reparte papeles con información de grupos de discusión sobre los juegos de Matrix y señala frases clave como "originalidad" y "frescura", lo que entusiasma a todos los presentes en la reunión, excepto a Thomas, que se supone que está trabajando en el juego, que algunos lo ven como el reflejo de cómo se sintió el director al verse obligado a hacer una cuarta película. |