La exitosa carrera de Sylvester Stallone ha estado marcada por logros, aunque también ha tenido algunos obstáculos causados por su eterno rival, Arnold Schwarzenegger. Dos de sus roles más inolvidables, Rambo y Rocky, han dejado una huella imborrable en la cultura popular. Aunque tenía la intención de despedirse del personaje del Potro Italiano con la película de 2006 titulada 'Rocky Balboa', su camino dio un giro inesperado en 2015 cuando surgió la oportunidad de retomar a su querido boxeador en 'Creed', esta vez como un personaje secundario que lucha contra el cáncer.
Inicialmente, Stallone dudaba en aceptar este nuevo desafío, pero su esposa, Jennifer Flavin, logró persuadirlo y cambiar su opinión. Actualmente, Stallone brilla en la serie Tulsa King en televisión mientras su legado en el cine continúa siendo inolvidable.
Su esposa lo ayudó a encarar su papel más difícil
En una entrevista para Fandom Wire, Stallone reveló que la única razón por la que aceptó interpretar a un Rocky enfermo en Creed fue gracias a la persuasión de su esposa, quien lo llamó cobarde de la manera más efectiva. En ese punto de su carrera, el actor dudaba en asumir el desafiante papel, pero no pudo resistirse al reto propuesto por Ryan Coogler, el director de la película, junto con Michael B. Jordan.
El concepto de "Resucitar a Rocky bajo la premisa de que te estás muriendo" le resultó difícil de aceptar y se mostraba preocupado por si el público realmente quería ver a su icónico personaje en esa situación. Incluso, Stallone planteó la idea de que fuera el vecino de Rocky quien estuviera enfermo y el boxeador lo ayudara, tratando de evitar la versión de un Rocky enfermo. Sin embargo, todo cambió cuando su esposa aportó su opinión al respecto. La influencia de su mujer en su decisión fue decisiva, lo que finalmente llevó a Stallone a aceptar el reto de interpretar a Rocky en su lucha contra la enfermedad en Creed.
El resultado fue un éxito rotundo, y la película se convirtió en un triunfo tanto para el actor como para el equipo detrás de la producción, demostrando que la confianza y el apoyo de sus seres queridos pueden marcar una gran diferencia en la carrera de un artista. Según afirmó el actor, Jennifer Flavin le hizo reflexionar al señalar que tenía miedo de enfrentar un nuevo desafío en su carrera y que eso lo convertía en cobarde. Finalmente, Stallone aceptó interpretar a Rocky en las dos primeras entregas de Creed, pasando el protagonismo a Michael B. Jordan en la tercera entrega.
No es la única saga de la que se despide
Además, se prepara para despedirse de Los Mercenarios en la cuarta entrega, cuyo estreno está pendiente. El relevo del grupo de acción especializado en misiones imposibles recae en Jason Statham, y la película también contará con la presencia de Megan Fox en el reparto.
Aunque el actor se mantiene ocupado con su proyecto de televisión, Tulsa King, está reduciendo sus apariciones en la gran pantalla y planea su retirada. A sus 77 años, Stallone, a pesar de estar en buena forma, siente que es momento de dar un paso atrás en su carrera cinematográfica. |
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