El mundo del cine está de luto tras la partida del destacado director canadiense Norman Jewison, quien falleció a la edad de 97 años en su hogar el pasado sábado, según confirmó su representante, Jeff Sanderson. Con una carrera ecléctica que abarcó más de cuatro décadas, Jewison dejó un impacto duradero en la industria cinematográfica, acumulando un total de 46 nominaciones y 12 premios Oscar a lo largo de su trayectoria.
Jewison saltó a la fama con su aclamada película "En el calor de la noche" en 1967, una obra que exploraba las tensiones raciales en el sur de Estados Unidos. Este filme, protagonizado por Sidney Poitier y Rod Steiger, no solo ganó el premio a la Mejor Película, sino que también marcó un hito al convertir a Poitier en el primer afroamericano en recibir el Oscar al Mejor Actor.
Detrás de este triunfo cinematográfico, se esconde una anécdota reveladora de la determinación de Jewison en abordar la discriminación racial. Durante la filmación, Jewison insistió en que Sidney Poitier debía permanecer en el set incluso cuando no estaba siendo filmado, desafiando las restricciones de la época que segregaban a los actores negros y blancos durante los descansos. Este acto desafiante no solo solidificó la colaboración exitosa entre Jewison y Poitier, sino que también subrayó el compromiso del director con sus principios y su lucha contra la injusticia social.
A lo largo de su carrera, Jewison continuó abordando temas sociales y raciales, influenciado por sus experiencias personales. En una entrevista de 2011, recordó un impactante episodio durante un viaje por el sur de Estados Unidos en la década de 1940, que sembró la semilla de su compromiso con la justicia social. Este compromiso se reflejó en películas como "Historia de un soldado" (1984), "Jesucristo Superstar" (1973), una audaz ópera rock que desafió convenciones, y "Huracán Carter" (1999), en colaboración con el actor Denzel Washington.
Su filmografía también incluye joyas como "El violinista en el tejado" (1971), una adaptación cinematográfica del exitoso musical de Broadway, la distópica "Rollerball" (1975), que exploró el auge de la tiranía empresarial en un futuro sombrío, y la encantadora comedia romántica "Hechizo de luna" (1987), protagonizada por Cher y Nicolas Cage.
A pesar de sus éxitos en Hollywood, Jewison decidió alejarse del epicentro de la industria y vivir en un rancho en las afueras de Toronto durante más de 20 años. Su enfoque único combinó el entretenimiento ligero con películas de fuerte carga social, manteniendo su independencia creativa lejos de las presiones de los estudios. |