¿Qué sucedió en el programa de ayer? ¿Hubo algún flechazo inesperado? ¿O tal vez alguna cita no funcionó como esperaban? ¡Sigue leyendo para conocer todos los detalles!"
Juan Antonio y Darius
Darius y Juan Antonio se conocieron en 'First Dates' y, aunque Darius había apreciado el acento de Juan Antonio, durante la cena se dio cuenta de que no tenían mucho en común. Juan Antonio quería hablar de sexo constantemente y compartió su fascinación por los disfraces y fantasías sexuales con Darius, quien no estaba interesado en ese tipo de conversación y también le dijo que encontraba anormal que estuviera excitado todo el tiempo.

Además, Darius le confesó que él era poco fogoso en el sexo y eso pareció ser un problema para Juan Antonio. Al final de la cena, Darius le dijo a Juan Antonio que no quería tener más citas con él debido a la falta de conexión y sentimiento de "flechazo". Juan Antonio se sintió herido por esto.
Samuel y Virginia
Samuel no podía entender como una chica tan guapa como Virginia estaba soltera, pero ella se lo ha ido explicando sin rodeos. Se ha vendido como una persona con taras y tóxica en las relaciones. A él le ha costado trabajo creerla incluso, cuando le ha dicho que no quiere tener niños, que le incomoda su presencia “noto que les caigo mal y ellos a mí, también”. Virginia no ha dudado en confesarle a Samuel que lo que busca en un hombre es dinero y en rechazar la oferta de la camarera de tomar juntos el postre en el reservado.

La joven llevaba toda la noche dándole señales de que no le estaba gustando nada de nada, pero Samuel estaba tan ilusionado que no se ha dado ni cuenta. Él estaba convencido de querer seguir leyéndole su libro a Virginia y no se esperaba que ella le dijera que no quería seguir conociéndole y se despidiera de él con un “Chao pescao”.
Lucía y Pelayo
Al saber que Pelayo es rapero, Lucía se ha venido arriba y le ha dicho que a ella no se le daría nada mal porque sentía que tenía algo de flow “revolucionario sería seguro”. Lucía le ha confesado a Pelayo que es una chica muy random y que no le quedaba claro con qué mano tenía que cortar la carne, y ya que estaban hablando de comer, él le ha dicho que le encantaban los planes de comer y que la mayoría del dinero se lo gastaba en comer por ahí, algo que ella también comparte.

Ambos han tenido claro que se habían gustado, que los dos estaban en el mismo momento vital, algo que podía ser bueno para comenzar una relación desde el mismo punto y sobre todo, que querían seguirse conociendo “vamos a tomar unas sidriñas”.
Merlis y Jaime
La cena de Merlis y Jaime ha comenzado hablando de sus lugares de origen y hablándose de usted. Él ha sentido que su cita le llamaba de usted porque le veía muy viejo para ella, pero la repostera le ha explicado que era por una cuestión de respeto y una vez que se ha aprendido que se llama Jaime, no ha sido fácil, ya para ella siempre será “Javier, no Jaime”.

Si Merlis le había gustado, cuando Jaime ha probado sus “cupcakes” ha sentido que podía ser la mujer de su vida. Ella pone mucho amor en sus magdalenas y a él le han encantado. En el fotomatón han jugado, se han dado un piquito y han salido del restaurante directos a tomarse otro vinito juntos.