¿Qué sucedió en el programa de ayer? ¿Hubo algún flechazo inesperado? ¿O tal vez alguna cita no funcionó como esperaban? ¡Sigue leyendo para conocer todos los detalles!"
Valentina y Antonio
Valentina es asesora de imagen y hace tan solo cuatro meses que dejó Colombia para venirse a vivir a Madrid. Lleva muchos años sin pareja y se define como una mujer tradicional. No le gusta la fiesta, ya ha tenido muchos excesos y es muy religiosa. Está buscando a un hombre que también lo sea “no es negociable” y quiere tener hijos y formar una familia. Antonio, su cita, ha entrado en el restaurante con paso lento pero seguro. Se ha presentado como un tipo creyente, no demasiado practicante y que de vez en cuando recibe señales “del de arriba” para que no se desvíe del camino.
Ella ha comenzado a conocerle de manera muy educada y ha sabido que vivía en Granada y que trabajaba como agente comercial. Ya sentados en la mesa y al saber que Valentina era asesora de imagen, Antonio se ha puesto en pie para que valorara su look. Ella ha vuelto a decir eso de “Tierra, trágame”, pero ha conseguido mentir sin que se diera cuenta y le ha dado un 7. Eso sí, en realidad pensaba que nada de lo que llevaba puesto pegaba entre sí y ha querido saber por qué había elegido las calaveras y el animal print.
Antonio no sabía lo que era el animal print y le ha dicho que él se ponía ropa de animales “tengo un bañador de leopardo” para mostrar su lado más salvaje “el salto del tigre y eso”. Valentina ha querido saber si a Antonio le gustaba la fiesta y él le he dicho que mucho, que le encantaba bailar y que era de los que se subían a la tarima. Él lo baila todo “lo único que no sé cómo se baila es la ópera, me gustaría ir a una para saber cómo se baila”.
Antonio no ha dudado en pagar la cena y al escuchar que a su cita se le caía algo, se ha acercado corriendo a recogerlo, pero no lo ha hecho y Valentina se ha quedado flasheada “le he dicho “gracias”, pero no lo ha recogido”. En el momento de la decisión final, ella ha sido muy clara y ha dicho que no quería repetir. A él le ha gustado su forma de ser y sus aspiraciones, pero su físico no estaba dentro de su prototipo de mujer.
Alejandro y Sofía
Alejandro se ha definido en ‘First Dates’ como una chico muy simpático y muy guapo, se encanta cuando se mira en el espejo, pero asegura tener el ego muy controlado. Él sabe que su cita va a ser con Sofía, se han visto muchas veces en la disco, pero no han hablado casi y ella es “una pija macarra” que le vuelve loco. Sofía, la chica que le ha robado el corazón a Alejandro, se ha presentado como una chica de Majadahonda que puede parecer pija, pero que es “muy basta hablando” y a la que le encanta salir a beber e ir de fiesta con sus amigos. Al ver que Alejandro estaba sentado en la barra, le ha entrado la risa y le ha dicho al presentador que le conocía.
Sobera le ha contado que las amigas de Alejandro habían preparado la cita porque ella le gustaba mucho al soltero y ella ha alucinado. Alejandro se ha quedado un poco mudo, pero ella ha valorado que hiciera algo así para conocerla mejor. Alejandro y Sofía estaban convencidos de que estaban viviendo la aventura más fuerte de sus vidas. Él ha sido muy sincero y le ha confesado que le gustaba mucho, y que sentía que era mejor poderse conocer en ‘First Dates’ y no en una noche de fiesta. Eso a ella le ha parecido genial.
Llevaban mucho tiempo sin verse y él le ha contado que se había quitado las redes porque en su pueblo había un ambiente muy tóxico y era más feliz sin ellas. Seguía estudiando bachillerato y también trabajaba en una tienda de zapatillas. Ella está en la carrera, pero no se le está dando muy bien, por lo que él se ha prestado voluntario para reconducir su camino “no te flipes, que tú estás en Bachillerato todavía”. Sofía ha respirado tranquila al saber que a Alejandro también le gustaba hacer deporte y que su deporte preferido era el golf igual que el suyo.
Alejandro se ha asustado un poco al saber que la última relación de Sofía se rompió porque ella era un poco tóxica y no le dejaba salir con sus amigos. Él dejó a su pareja por lo mismo y le ha tranquilizado escuchar que ella siente que ha cambiado y que eso no lo va a volver a hacer. Los dos estaban encantados de haberse podido conocer un poquito mejor, se han dado su primer piquito en el fotomatón y han sentido que sus amigos se iban a alegrar de que se hubieran gustado. No han parado de reírse en toda la cena y eso es señal de que entre ellos puede surgir algo muy especial.
Mariano y Aída
Mariano ha llegado a ‘First Dates’ con la chaquetilla puesto y dispuesto a sorprender a su cita. Es un chef malagueño y ha querido ponerle un chispita de su arte a su cita. Está buscando a una mujer a la que le gusta la naturaleza y sea un poco lunática, pero no loca que “para loco ya estoy yo”. Aída, su cita, ha sorprendido al presentador con su look y le ha contado que es body piercings y tatuadora, hace unos años que descubrió su vocación y no ha parado de “perforar personas”. En el amor ha tenido cuatro relaciones largas y todas “interesantes”.
La joven se ha fijado en el pendiente de la nariz del chef y le ha dicho que era un poco pequeñito, pero todo tenía su motivo. El soltero le ha explicado que antes lo tenía más pequeño todavía y que al hacérselo “me desmayé y todo, tuve una especie de viaje astral”. Sí, Mariano es un hombre muy energético y vio una especie de luz al final de tune, pero lo vivió como un momento muy guay.
Aída se ha mostrado un poco más incrédula respecto al significado de los piercings porque no puedes saber qué es real y qué no. Los solteros han coincidido en que hace un tiempo que conocieron al amor de su vida, sus perros, y eso les ha encantado. Respecto a la música, Aída le ha dicho que le gustaba de todo, pero que no soportaba el reggaetón. Él ha querido saber el nombre de algún grupo que le gustara y ha flipado al escuchar que era megafan de Ojete Calor.
Aída ha dicho que sí quería tener una segunda cita con el chef y él le ha dicho que no, un vacile que ella tenía la sensación de que iba a suceder. A Mariano le ha encantado Aída y está deseando volver a quedar con ella.
Alegría y Francisco
Francisco se ha presentado en ‘First Dates’ como un chico al que se le da bien llevarse bien con todo el mundo y hacer amigos. Está buscando a una mujer alocada que le siga el ritmo, pero que al mismo tiempo sea responsable y sobre todo, que le guste viajar. Alegría, su cita, es una mujer que hace honor a su nombre y que derrocha alegría y simpatía. Le gusta mucho conocer gente y divertirse, pero cuando está triste intenta camuflarlo porque no le gusta que hagan bromas con su nombre.
La soltera le ha dicho a Francisco que era una mujer a la que le encantaba salir, conocer gente, viajar… Y él ha sentido que le estaba describiendo. Alegría todavía es joven y no ha conocido muchos países, pero Francisco le ha contado que juntos podrían acabar recorriendo el mundo en furgoneta. Le ha explicado que su vida cambió cuando se fue a estudiar a Sudamérica y que tiene que conocer esa parte del mundo.
Respecto a su plan perfecto, Alegría le ha confesado que le encanta salir “perrear te sube el ánimo muchísimo”. Él se ha hecho el interesante, pero al momento le ha dicho que le llamaban el rey de la fiesta y que “una buena fiesta acaba cuando sale el sol”. Estaban tan emocionados de haberse conocido que él le ha soltado un “¿Cuándo nos casamos?”. Eso sí, todavía no habían hablado de los hijos. Él no quiere tener hijos y ella le ha dicho que no los quiere ya, pero sí quiere tener al menos uno para saber lo que es.
A ella no le ha gustado lo de los hijos, pero se ha dejado llevar. Él estaba en una nube y ha sentido que era la primera de muchísimas citas más “una tarde contigo puede ser el mejor día de mi vida, ¿Cuándo nos casamos?”.
U.S.A.
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