First Dates, el popular programa de citas de Cuatro, se prepara para recibir dos importantes bajas en su equipo de camareros. Lidia Torrent, quien ha estado atendiendo a los comensales durante seis años, no regresará después de su baja por maternidad, ya que ha decidido embarcarse en nuevos proyectos. Durante su ausencia, su madre Elsa Anka la sustituyó, pero ahora también abandonará el programa y dejará su puesto a Laura Boado, una exconcursante de la última edición de La Isla de las Tentaciones.
Mediaset y la productora Warner Bros. ITVP España han elegido a Boado, una joven gallega, para encargarse de atender a los solteros en busca del amor en First Dates. Sin embargo, esta elección no ha sido al azar, ya que Laura cuenta con una amplia experiencia en el sector de la hostelería.
Laura Boado Fernández nació y creció en un humilde barrio de Santiago de Compostela hace 24 años. Sus padres eran propietarios de un bar, y su vivienda se encontraba en la parte superior del local, lo que hizo que creciera rodeada de los habituales del establecimiento. Su crianza en este entorno le brindó la oportunidad de conocer a personas de diferentes edades y de todo tipo. Pasaba gran parte de su día en el bar: desayunaba allí, iba al colegio y regresaba para almorzar el menú del día. Por las tardes, si no tenía compromisos de estudio o entrenamiento, ayudaba en el bar o jugaba partidas de cartas con los clientes habituales, especialmente con los más mayores.
Cuando se le pregunta sobre el bar de sus padres, Laura comenta que la hostelería es un oficio exigente y que requiere verdadera pasión. En su familia, la hostelería es una vocación y una forma de vida. Boado afirma que todos los españoles deberían trabajar al menos un año en el sector de la hostelería, ya que es una experiencia que enseña humildad y permite valorar el esfuerzo necesario para ganarse la vida.
Aunque el bar de sus padres ya no existe debido a la separación de estos, Laura se trasladó con su madre a A Coruña, donde abrieron un asador de carnes llamado "Arde Lucus". A los 18 años, empezó a trabajar en el negocio familiar para financiar sus estudios de Diseño de Moda en A Coruña. Laura recuerda que al principio tuvo dificultades para aprender a llevar la bandeja y a servir correctamente las cañas, pero con el tiempo mejoró. Aunque cocina bastante bien, no comparte la misma pasión por la hostelería que su familia. Cocinar es más un hobby para ella, una forma de desconectar en casa.
El amor por el fútbol también ha sido una parte importante de la vida de Laura. Comenzó a jugar a los 7 años y se unió a un equipo local. En aquel momento, no había muchos equipos femeninos disponibles, pero eso no impidió que Laura siguiera su pasión. Jugó al fútbol durante varios años y, más tarde, se unió a la liga gallega de fútbol sala, donde compitió a nivel regional.
El salto a la televisión se produjo en 2021 cuando Laura decidió participar en la tercera edición de La Isla de las Tentaciones, un exitoso reality show donde parejas consolidadas ponen a prueba su relación en un entorno de seducción y tentaciones. Su personalidad y su actitud positiva llamaron la atención de los espectadores, y aunque su relación en el programa no prosperó, Laura se convirtió en una de las concursantes más populares.
Después de su paso por La Isla de las Tentaciones, Laura Boado ha recibido varias ofertas para trabajar en televisión y en otros proyectos relacionados con el mundo del espectáculo. Sin embargo, fue la oportunidad de unirse al equipo de camareros de First Dates lo que realmente llamó su atención. Boado considera que el programa es una plataforma para conocer gente y ayudar a los solteros a encontrar el amor, algo en lo que ella misma cree firmemente.
Laura Boado se encuentra emocionada y agradecida por esta nueva etapa en su vida. Está lista para enfrentar los retos que le presente First Dates y espera poder aportar su experiencia en hostelería y su carisma para brindar una excelente atención a los comensales del programa.
Con su incorporación al programa, Laura Boado se une a un equipo de camareros que se ha convertido en un elemento central del éxito de First Dates. La naturalidad, la simpatía y la profesionalidad de los camareros han conquistado al público, convirtiéndolos en personajes queridos y reconocibles.
Esperemos que Laura Boado se adapte rápidamente a su nuevo rol en First Dates y que su presencia continúe deleitando a los espectadores con su carisma y habilidades en la atención al cliente. Sin duda, su trayectoria en la hostelería y su paso por La Isla de las Tentaciones le brindarán las herramientas necesarias para triunfar en este nuevo desafío televisivo.
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U.S.A.
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