El conocido programa "Pasapalabra" ha decidido dar un giro radical a su mecánica, sorprendiendo a los espectadores con la eliminación de una de sus pruebas míticas: la Sopa de Letras. Esta prueba, que ha sido parte fundamental del juego, será sustituida por la innovadora y desafiante prueba de Palabras Cruzadas, introduciendo así una nueva dinámica que promete mayor emoción y complejidad.
La prueba de Palabras Cruzadas ya tuvo su debut en un especial navideño con la participación de Cristina Pedroche y Josema Yuste como testigos de su complejidad. En esta nueva modalidad, los equipos, liderados por el equipo Azul y el equipo Naranja, deberán adivinar nueve palabras en un tiempo limitado de 75 segundos. La dinámica implica que los concursantes cuenten con dos paneles: uno con el principio de las palabras y otro con el final. La correcta unión de ambas mitades formará la respuesta acertada.
Roberto Leal, conductor del programa, desempeñará un papel crucial al proporcionar a los equipos las definiciones de las palabras y ofrecerles dos opciones. En caso de error, el turno pasará al compañero, manteniendo así la tensión y competitividad en el juego. Sin embargo, la novedad conlleva una reducción significativa en el tiempo acumulado por cada palabra acertada, otorgando solo 2 segundos adicionales, en comparación con los 40 segundos que se podían obtener en la prueba anterior de Sopa de Letras.
Este cambio estratégico tiene un impacto directo en la etapa final del programa, conocida como "El Rosco". Anteriormente, con la prueba de Sopa de Letras, los concursantes podían acumular hasta 40 segundos, pero con Palabras Cruzadas, el tiempo máximo se ve drásticamente reducido a 18 segundos. Este ajuste busca intensificar la emoción en la fase culminante del juego, obligando a los participantes a ser más rápidos y a depender menos de la opción de "Pasapalabra". |