Martin Scorsese, uno de los grandes directores del cine contemporáneo, se ha erigido involuntariamente como el mayor perdedor en la rica historia de los Premios Óscar. Esta triste distinción se cimenta en tres obras magistrales: 'Los asesinos de la luna', 'Gangs of New York' y 'El Irlandés', todas ellas con impresionantes 10 nominaciones cada una, y ninguna de ellas logrando alzarse con la preciada estatuilla dorada.
La última entrega de los Óscar generó polémica y sorpresas, pero ninguna tan impactante como el desafortunado destino de Scorsese y su obra más reciente, 'Los asesinos de la luna'. La película, con su elaborada trama sobre la fundación del FBI y las complejidades de la historia norteamericana, partía como una de las favoritas con 10 nominaciones, solo para salir con las manos vacías.
Esta no es la primera vez que el renombrado director se enfrenta a la amarga realidad de un logro negativo. Tanto 'Gangs of New York', derrotada por 'Chicago', como 'El Irlandés', eclipsada por 'Parásitos', comparten el mismo destino desafortunado. Aunque Scorsese logró obtener un Óscar por su trabajo en 'Infiltrados', muchos lo ven como una especie de compensación más que como un reconocimiento genuino a su maestría cinematográfica.
El director se une a un selecto grupo de películas que acumularon 10 nominaciones sin obtener ningún premio, como 'Valor de ley' y 'La gran estafa americana'. Sin embargo, el consuelo de la compañía no mitiga el impacto de este hito negativo en la carrera de Scorsese. Con la esperanza de que el próximo proyecto del aclamado cineasta encuentre un destino más favorable, queda por verse si esta racha de desgracias se romperá y el Séptimo Arte le brindará la recompensa que merece. |