An Ordinary Case

Le Fil es una obra maestra del cine judicial. Daniel Auteuil, tanto en su rol de director como de protagonista, ofrece una interpretación profunda y conmovedora. La trama, basada en hechos reales, mantiene al espectador al borde de su asiento, cuestionando constantemente la verdad y la justicia. La dirección es impecable, y el guion, adaptado del libro de Jean-Yves Moyart, es brillante. Sin duda, una de las mejores películas del año.​

La película presenta una historia intrigante y una actuación sólida de Auteuil. Sin embargo, en algunos momentos, el ritmo se vuelve lento y ciertas escenas se sienten innecesarias. Aunque la temática es relevante y aborda cuestiones importantes sobre la justicia, la ejecución podría haberse beneficiado de una edición más dinámica. Aun así, es una película que invita a la reflexión.