La vida es dura para un friki. Si no, que se lo pregunten a Malcolm, un adolescente criado por su madre soltera, Lisa, en "Los Bajos" de Los Ángeles o, lo que viene a ser lo mismo, el barrio de Inglewood, California. Malcolm está obsesionado con el hip-hop de los 90, toca en una banda de punk-rock y sueña con ir a Harvard. La invitación casual a una fiesta clandestina desemboca en una aventura en la que pasará de ser un bicho raro a ser un camello; para, finalmente, acabar encontrándose a sí mismo. |