Tras rodar una película en Francia, el director David Merrill se encuentra con una acusación de comunista por parte del Comité de Actividades Antiamericanas. Durante su comparecencia se niega a dar nombres, hecho que le costará su carrera. Cuando está a punto de delatar a algunos de sus compañeros, descubre que hay una prioridad mayor en su vida que el cine: el apoyo de una causa justa. |