El asesino número uno del MI6 tiene un hermano. Lamentablemente para él, es un hooligan del fútbol inglés, del pueblo de Grimsby.
Nobby tiene todo lo que un hombre pobre de la ciudad inglesa de pescadores Grimsby puede desear – 9 hijos y la novia más atractiva del norte de Inglaterra.
Sólo añora una cosa en su vida: a su hermano pequeño, Sebastian. Tras ser adoptados de niños por diferentes familias, Nobby ha pasado 28 años buscándole. Tras descubrir su localización, Nobby decide reunirse con su hermano, sin saber que no solo es un agente del MI6 sino que además acaba de destapar una trama que pone en peligro al mundo. A la carrera y acusado erróneamente, Sebastian se da cuenta que si va a salvar el mundo, necesitará la ayuda del idiota de su hermano mayor.
Comparada con basuras superficiales como 'Zoolander 2', 'Grimsby' se puede considerar arte de altura. Al contrario que Ben Stiller, al menos Cohen lo intenta
El peculiar sentido del humor de Sacha Baron Cohen - burlarse de todas las normas sociales y satirizar todo lo que se le caiga por delnate - se cobra una nueva víctima en esta parodia del cine de espías. Aquí se ríe de los gordos, los parados, los judíos, los vegetarianos, enfermedades como el cáncer o el sida, la zoofilia. Mark Strong - habitual tipo duro en las películas del género - hace una parodia de sí mismo y el suyo acaba resultando ser el personaje más hilarante del filme, sobre todo por las situaciones a las que lo aboca el personaje de Baron Cohen - su hermano en la pantalla -. La obsesión escatológica de Cohen alcanza aquí un nuevo culmen cinematográfico que hará que jamás vuelvas a mirar a los elefantes de la misma manera. Película para reírse a carcajada limpia no apta para gente escrupulosa.