Dark Inclusion

Pier Ulmann es un hombre de unos 30 años de edad que vive solo y un tanto ensimismado en París, combinando su trabajo como peón con otras “labores” a las órdenes de Kévin, un joven camello que rinde cuentas a Rachid, quien, a su vez, explota la excepcional memoria visual para localizar lugares clave antes de dar sus golpes. Rachid es benévolo, pragmático y, cuando es necesario, autoritario, y constituye + para Pier una especie de educador en la sombra, o quizá algo más… Una noche, en el portal de Pier, aparece un cadáver con pintas de vagabundo que no tiene la mano derecha. Se trata de Victor, su padre, al que llevaba sin ver desde la infancia. Tras un accidente que sufrió de joven y lo dejó mutilado cuando tallaba un diamante en el taller de su padre en Amberes (Bélgica), Victor fue rechazado por los Ulmann. Su vida transcurrió por los derroteros de la radicalización política y los continuos fracasos de proyectos utópicos: una larga decadencia que lo llevó a desaparecer de la existencia de Pier. Las heridas de su infancia nunca cicatrizaron; muestra de ello es el enfrentamiento de Pier durante el funeral con su familia de Amberes: su tío Joseph, desde hace tiempo el ¨jefe¨ de la familia, su tía Olga, su primo Gabi… Este último le ofrece con torpeza dinero, le garantiza el apoyo de la familia y le propone que regrese a Bélgica. Pier, lleno de dolor y rebeldía, se da a la fuga. Al ver a su protegido encerrado en un rencor que deriva poco a poco en odio, Rachid le da un consejo de lo más perturbador: que acepte la proposición de su primo, que se labre un hueco en la familia de los Ulmann y, cuando llegue el momento, que ejecute su venganza y les dé donde más les duele: en sus bolsillos, en los diamantes. VER TRÁILER