Son las nueve de la mañana de un caluroso día de verano en el barrio madrileño de Usera. Paco, Ramón y Andrade, tres amigos que llevan en paro desde que cerró la empresa en la que trabajaban, han quedado para ejecutar un plan. Cuando por fin se reúnen los tres, un contratiempo les impide salir de casa: el coche que necesitaban para trasladarse está averiado.
Mientras buscan otra manera de llegar a su destino, los amigos se ven envueltos en una serie de incómodas discusiones que poco a poco derribarán sus muros y arrancarán sus máscaras. Andrade acaba de encontrarse en la calle con una persona cuya ausencia ha marcado su vida, Paco está a punto de descubrir un doloroso secreto de su matrimonio y Ramón está obsesionado con una serie de cuestiones psicológicas que nadie entiende. La respuesta a sus preguntas y la revelación de sus miserias acabará por cambiar para siempre su amistad. Mientras tanto, cada minuto que pasa les aleja irremediablemente de ejecutar el plan.
Un estilo ágil, con osados ataques de plano, encuadres cerrados y fondos rotos, que además sirven a Menárguez para presagiar, de alguna forma, lo que se avecina. Desternillante, tremenda y actual.
La película juega con una tensión siempre in crescendo, que se consigue a través de unos diálogos muy vivos y muy auténticos, estupendamente recitados por un brillante terceto de actores
Es breve, prieto de contenido e intenciones y dos veces bueno, porque tiene un guion muy bien trabajado (...) y porque la interpretación de sus tres actores es un frutero lleno de sabores, matices, texturas, cáscara y pulpa