El dueño gay de un cabaret, Armand, y su pareja Albert, una drag queen, acceden a interpretar un montaje para que su hijo Val pueda presentarlos a los conservadores padres de su prometida, Barbara Keely. El padre de Barbara es el senador y vicepresidente del Commité para la vigilancia de la Moral.
No es la suprema obra maestra que podría haber sido, pero la dirección de Nichols es muy refinada y algunas de las frases y los detalles son terriblemente divertidos
No le faltan momentos divertidos, pero la mayor parte de 'Una jaula de grillos' parece tópica y predecible. Lo que era original en 1978 ya no es ni la mitad de inspirado