Eiko Yagami (Ryoko Yonekura) es un "Marubo", una unidad de la División de Crimen Organizado de la Comisaría Central de Ueno que se ocupa directamente de las bandas organizadas para intentar mantener la paz. Sin embargo, Eiko tiene algunas cosas aparte: es prestamista de dinero para sus compañeros policías sin cobrar intereses a cambio de información y también está dispuesta a hacer algún que otro trabajo secundario para aquellos del lado criminal por dinero. Un día, Kasumi (Riho Takada), hija del líder de la banda Senma-gumi (Toshiyuki Nishida), es encontrada muerta a puñaladas. Como esto amenaza con enfrentar a una pandilla contra otra, Eiko y la policía tienen que darse prisa y encontrar a su asesino.
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