En una isla aislada vive una comunidad autónoma de niños que no hablan y se comunican sólo con gestos. Guiados por los mayores, operan como una comuna agraria con reglas y creencias estrictas. Los adultos son desterrados a los bosques circundantes y cada año, el miembro más viejo de la aldea es enviado a saltar desde un acantilado, una ceremonia que se cree que otorga la eterna juventud al elegido. Esta forma de vida se ve amenazada cuando un niño aventurero atiende la llamada del bosque prohibido.
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6.06
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