Antoine Doinel, soldado voluntario de segunda, es expulsado del ejército por su absoluta falta de espíritu militar. Todavía es un adolescente y carece de habilidades para trabajar en un oficio, su única destreza consiste en besar a toda mujer que se le ponga por delante. Finalmente encuentra trabajo como recepcionista nocturno en un hotel de mala fama. De allí pasará a una agencia de detectives privados. |