A Roland, miembro de Ayuda Legal, le corresponde defender a un delincuente habitual acusado de matar a un policía.
Filme menor pero tremendamente acertado. Aunque parte de una premisa mil veces vista, el tratamiento que hace Glickenhaus (todo una institución en el subcine violento) eleva la historia por encima de sus coetáneas.
Ver crítica completa