Críticas de la prensa de CECIL B. DEMENTE

Tiene una premisa radical, pero la lanza al nivel de un sketch muy malo del Saturday Night Live

El antaño enfant terrible John Waters ha limado un tanto en sus últimos filmes lo agresivo de sus imágenes. No así lo disolvente de sus propuestas, que atacan sin piedad las convenciones sociales y arremeten contra cualquier atisbo de corrección. (...) Tan divertida como salvaje.

Es Waters a la manera que más nos gusta de él: con risas punzantes y servida con retorcimiento 

Muy entretenida e inteligente en la elección de sus objetivos, pero carece del estilo desenfrenado de algunas de las obras tempranas de Waters

Una pequeña comedia audaz con explosiones de hilaridad y una cierta energía atolondrada